Crónica Global es un proyecto periodístico joven. Tal y como hemos recordado (y celebrado) a lo largo de la última semana, hemos cumplido cinco años. A diferencia del resto de cabeceras de nuevo cuño e incluso otras de mayor trayectoria, pocas iniciativas pueden presumir de una salud de hierro como la que disfrutamos tanto desde el punto de vista humano como del empresarial.

Como Joaquín Romero señaló esta semana, contar con unas cuentas saneadas es básico para poder practicar un periodismo independiente y sin ataduras como el que nos gusta ejercer. Igual de capital resulta el haber construido un equipo cohesionado, en el que conviven séniors y júniors y en el que todo el mundo aprende.

Así lo han indicado tanto Gerard Mateo como María Jesús Cañizares a lo largo de la semana en dos apuntes sobre otra cuestión clave para nuestra redacción: Crónica Global es un producto coral que se presenta cada día gracias a la colaboración de muchas personas --redactores, opinadores, diseñadores, administrativos, personal de márketing, de dirección...-- que sudamos la misma camiseta.

Somos desacomplejadamente constitucionalistas, si esta es la fórmula para indicar que en el espacio en el que nos sentimos más cómodos y donde queremos estar es el del centro, tal y como han remarcado Alejandro Tercero y Manel Manchón. De hecho, en cinco años nos hemos convertido en la referencia de todos aquellos que en Cataluña no han abrazado el proyecto independentista sin más y que se habían quedado sin espacio en los medios catalanes.

La visión crítica y el no casarnos con nadie son otras de las marcas de la casa, así como el reivindicar el periodismo. El de no quedarse nunca sólo con el primer titular y pisar la calle. Una práctica fagocitada por los comunicados y las ruedas de prensa. Incluso hemos ido un paso más allá en las últimas semanas con la publicación del primer libro de estilo adaptado a la prensa digital, porque leer en un dispositivo móvil no es excusa para maltratar la lengua.

El aniversario de Crónica Global ha llegado en uno de los momentos más difíciles. Nunca nos imaginamos que soplaríamos velas en el marco de una pandemia mundial y tras estar más de dos meses confinados, un tiempo en el que las estructuras de los medios se han puesto a prueba. ¿Cómo lo hemos superado? Con más de cuatro millones de lectores que nos apoyan día tras día y constituyen una comunidad con la que nos gusta interactuar.

Gracias por estar a nuestro lado todo este tiempo. Nosotros seguimos remando.