Pensamiento

A Bankia le está saliendo caro el toque de campana de Rato

5 enero, 2016 00:03

El Grupo BFA-Bankia tendrá que provisionar en 2016 otros 1.060 millones de euros para cubrir contingencias derivadas de la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de Bankia en 2011, por lo que el total provisionado hasta la fecha para hacer frente a las demandas civiles de la Oferta Pública de Venta (OPV) totalizará, hasta el momento, los 1.840 millones, según las cuentas más fiables. Esto tendrá un inevitable y fuerte impacto negativo en las ratios de capital de la entidad, por mucho que se esté estudiando el tratamiento contable de la provisión y la posibilidad de que ésta se realice directamente contra patrimonio en lugar de a través de la cuenta de resultados.

Las provisiones hasta la fecha para hacer frente a las demandas civiles de la OPV de Bankia totalizarán 1.840 millones, según las cuentas más fiables

De entrada, el volumen total a provisionar, según algunos analistas representa cerca del 19,0% del margen de explotación estimado para 2015 y en torno al 35,0% del Beneficio Neto Actualizado (BNA) esperado.

Es la consecuencia del toque de campana en la sede de la Bolsa del entonces presidente de la entidad, Rodrigo Rato, el día de su salida al mercado el 19 de julio de 2011 y que viene a demostrar cuan cortas se quedaron las estimaciones realizadas en su momento, entre las que sobresalían las del ministro de Economía, De Guindos, cuando limitaba las potenciales pérdidas a "500 o 600 millones de euros".

Aunque el asunto de la salida de Bankia a Bolsa, liderada por Rato, se encuentra en pleno proceso judicial en la Audiencia Nacional, bajo la batuta del juez Andreu, las sentencias contra la entidad surgen desde otras instancias judiciales sin esperar sentencia definitiva alguna, que algún día deberá salir del órgano jurisdiccional, único en España especializado para el conocimiento de determinadas materias que vienen atribuidas por Ley de 1977. Lo cierto es que la cuenta de resultados de Bankia se resiente una y otra vez por las dudosas decisiones adoptadas durante los mandatos de Blesa y Rato al frente de la entidad, con el beneplácito cuando no con la permisividad de los entonces gobernador del Banco de España y del presidente de la CNMV, señores Fernandez Ordoñez y Segura, respectivamente. Y que las cuentas de Bankia se resientan, es tanto como decir que se resienten las cuentas de los contribuyentes que son, a la postre, los que ponen los dineros para reflotar la entidad nacionalizada.

Porque a las provisiones destinadas a la salida de Bankia a Bolsa hay que sumar los más de 1.500 millones de euros destinados a compensar a los afectados por las preferentes, colocadas en su momento para 'fortalecer' la capitalización de Caja Madrid y que ha quedado probado que no fue sino un burdo engaño, que perseguía aligerar los bolsillos de todo aquel que creía lo de los duros y las cuatro pesetas.

Al día de hoy, nacionalizar Bankia ha costado 22.424 millones de euros con la entrada del Estado en el capital de la entidad con lo que se convirtió en accionista mayoritario

Al día de hoy, nacionalizar Bankia ha costado 22.424 millones de euros con la entrada del Estado en el capital de la entidad con lo que se convirtió en accionista mayoritario. Sin embargo, las ayudas públicas concedidas ascienden a un total de 147.810 millones en concepto de capital, avales, adquisición de activos del Sareb (el 'banco malo'), compra de títulos, créditos fiscales y préstamos del Banco Central Europeo (BCE).

No se lo están poniendo fácil al presidente de Bankia, Goirizolzarri , y al equipo que trata reflotar la entidad, y si no es por las preferentes, es por la salida a Bolsa y si no por el cuestionable informe de los peritos del Banco de España que le ha supuesto al banco público un formidable varapalo en su cotización bursátil.

Todo un permanente quebradero de cabeza para el equipo de gobierno de Bankia y BFA que, sin embargo, tiene su parte positiva entre los bufetes de abogados que nunca como hasta ahora habían descubierto los medios de comunicación y la publicidad para captar clientes entre preferentistas, lesionados por la OPV de Bankia o cláusulas suelo, aunque para ello tengan que competir en los matinales radiofónicos con las ofertas de los supermercados o el 2x1 de la óptica de turno, algo que no habían hecho pese a que desde 2001 la publicidad de los abogados dejó de estar prohibida, quedando vedado, al día de hoy, solo la publicidad engañosa, los contactos directos con personas que están pasando una situación difícil y todo tipo de publicidad que genere expectativas de resultados injustificadas.

Y todo ello, a la espera de las consecuencias que va a suponer en el caso Bankia la retirada de la querella interpuesta por UPyD a mediados de 2012 por presuntos delitos de estafa, apropiación indebida, falsificación de cuentas anuales en conexión con delitos societarios, administración fraudulenta y maquinación para alterar el precio de las cosas. Y ello, tras comprobar cómo la Fiscalía decidía ejercer de don Tancredo renunciando a actuar en el caso.