Imagen de la portada de 'Tres', del escritor israelí Dror Mishani / EMPÚRIES

Imagen de la portada de 'Tres', del escritor israelí Dror Mishani / EMPÚRIES

Cine & Teatro

Los crímenes de Israel

La película francesa 'Fleuve noir', basada en una novela de Dror Mishani, muestra el talento del escritor iraelí, que participa en la nueva edición de BCNegra

7 febrero, 2023 19:20

Cada año, por estas fechas, se celebra en Barcelona el festival BCNegra, dedicado a la literatura policial. Se lo inventó hace casi dos décadas el librero y especialista en novelas de misterio Paco Camarasa, que en paz descanse, quien también estuvo al frente de la librería Negra y criminal, que tampoco existe a día de hoy. Su cargo en el festival lo heredó el novelista Carlos Zanón y este año se celebra la edición número dieciocho del certamen. Como es habitual, se apuntan a BCNegra un buen número de autores nacionales e internacionales, por lo que se hace difícil citar un nombre concreto a la hora de recomendárselo a mis queridos lectores. De todos modos, me arriesgaré y destacaré entre la presencia internacional al israelí Dror Mishani (Jolón, 1975), al que conocimos gracias a la editorial Anagrama, que publicó a principios del 2021 su cuarta y espléndida novela, Tres, que narraba las desventuras sentimentales (y criminales) de tres mujeres de Tel Aviv (ciudad en la que reside el autor) con un mismo hombre, un sujeto de apariencia seductora que ocultaba a un asesino cruel y demente que acaba encontrando la horma de su zapato de una manera que no desvelaré para no incurrir en el spoiler. Tres gozó de buenas críticas y se vendió decentemente, así que me puse a esperar a que aparecieran en España las tres anteriores novelas de nuestro hombre, protagonizadas por un policía con problemas de alcohol que atiende por el redundante nombre de Avraham Avraham.

Una escena de 'Fleuve noir', con Vincent Cassel 

Una escena de 'Fleuve noir', con Vincent Cassel 

En el ínterin, pillé en Movistar la película francesa Fleuve noir (2018, aquí titulada Sin dejar huellas), dirigida por un tipo francamente interesante y muy personal, Erick Zonca (Orleans, 1956), tan interesante y personal que es de los cineastas que no ruedan cuando quieren, sino cuando pueden o los dejan (suelen pasar años entre película y película). Gracias a los créditos finales, descubrí que estaba basada en una novela de Dror Mishani, la primera aventura del inspector Avraham, titulada en Francia Une disparition inquiétante. El largometraje del señor Zonca me gustó mucho (el siempre intenso Vincent Cassel interpretaba al inspector Avraham, cuyas pesquisas se habían trasladado convenientemente de Israel a Francia) y, sobre todo, me hizo recordar al señor Mishani y esos libros suyos que no se habían editado en España. Y como cuando algo me gusta, ya sea un libro, un disco o una película, me da por acaparar todo lo que haya hecho el escritor, el músico o el cineasta en cuestión, me hice con las ediciones en francés de Une disparition inquietante (2011), La violence en embuscade (2013) y Les doutes d´Avraham (2015). No lo lamenté: puede que Israel no sea una fábrica de relatos criminales tan estajanovista como los países nórdicos, pero el señor Mishani es de lo mejor que he leído proveniente de ese país que solo sale en los telediarios por sus escaramuzas permanentes con los palestinos y las corruptelas de su presidente eterno e incombustible Benjamín Netanyahu (Bibi para los amigos).

Adicto a un escritor

En las aventuras del inspector Avraham, el conflicto entre Israel y Palestina o no aparece o lo hace como un molesto ruido de fondo. Se agradece que un país monotemático produzca novelas negras tan interesantes como las del señor Mishani, que me vi impelido a comprar en francés porque Anagrama, o la editorial que fuera, se mostraba reticente a publicarlas en España (los que lean francés, pueden adquirirlas vía Amazon.fr por la módica suma de menos de ocho euros en edición de bolsillo: no se arrepentirán).

Dror Mishani actúa, por así decirlo, este sábado en el barcelonés cine Aribau, compartiendo diálogo con otra figura interesante de la actual novela criminal, la norteamericana Laura Lippman, cuyos libros se van traduciendo al español a buen ritmo por cortesía de la editorial Salamandra. Supongo que así nos enteraremos de en qué anda metido el señor Mishani desde que apareció en 2018 Tres en su país de origen. ¿Una historia con su exposición, su nudo y su desenlace o una nueva entrega de las aventuras del redundante inspector Avraham? La verdad es que me da lo mismo, pues estamos ante un autor de los que se te quedan en la cabeza y de los que te haces adicto. Me disculpo con el resto de figuras del género negro que caerán por Barcelona esta semana, pero llevaba tiempo pensando en reivindicar al señor Mishani y creo que no encontraré un momento más oportuno que éste.