La pirámide de Chichén Itzá, como una matrioska

La pirámide de Chichén Itzá, como una matrioska

Artes

La pirámide maya de Chichén Itzá está construida como una matrioska

Arqueólogos descubren una tercera estructura geométrica dentro del monumento

23 noviembre, 2016 00:00

Curiosa relación entre la cultura maya y la tradición rusa. Arqueólogos han descubierto que la conocida pirámide de Kukulkán, en Chichén Itzá (Yucatán, México), fue levantada en tres fases: cada una ocultaba la anterior, como las famosas muñecas matrioskas.

A la vista está la estructura de la pirámide mayor, levantada entre 1050 y 1300. La existencia de la estructura media (800 a 1000 dC) también estaba documentada.

El origen

Ahora, investigadores han descubierto el núcleo (500 a 800 dC) gracias a la Tomografía Eléctrica 3D. Consiste en una técnica no invasiva que mide la resistencia en el flujo de corriente eléctrica para mapear digitalmente el interior de la estructura existente.

El descubrimiento de la tercera pirámide podría iluminar la cultura maya original, antes de que se entremezclara con poblaciones del centro de México.

Relación con las divinidades

En 2015, un grupo de arqueólogos descubrió que la pirámide se asienta sobre una gruesa capa de 5 metros de piedra caliza sobre un cenote, o pozo abastecido por un río subterráneo, común en la región y referenciado por los mayas.

En el templo de Kukulkán se dio culto al dios Serpiente Emplumada. He aquí la última conexión con las matrioskas. El origen del juego ruso se encuentra en Japón, en un conjunto de muñecas de madera que representaban a los siete dioses de la fortuna. Fukurokuju contenía en su interior a las otras deidades.