Interior de la Cripta Gaudí / COLÒNIA GÜELL

Interior de la Cripta Gaudí / COLÒNIA GÜELL

Artes

Descubriendo la Cripta Gaudí de la Colonia Güell, el laboratorio de la Sagrada Familia

En Santa Coloma de Cervelló, a tan solo veinte minutos de Barcelona, se encuentra una de las obras menos conocidas de Antoni Gaudí

2 septiembre, 2018 15:58

En el año 2005, siete edificios construidos por Antoni Gaudí fueron declarados Patrimonio de la Humanidad. De ellos, seis son viejos conocidos de todo el mundo: la Sagrada Familia, la Pedrera, la Casa Vicens, el Parque Güell, el Palau Güell y la Casa Batlló. El séptimo tesoro consagrado por la Unesco, sin embargo, es mucho menos célebre. Se trata de la Cripta Gaudí de la Colonia Güell, “una joya monumental y fluida en la que el arquitecto de las obras imposibles puso a prueba su fantástica inteligencia”, según detallan desde BCN+.

La Cripta Gaudí está situada en un pequeño promontorio rodeado por un bosque de pinos, dentro del singular conjunto modernista de la Colonia Güell. Se trata de una construcción especial, levantada entre 1908 y 1917 por encargo del empresario Eusebi Güell, mecenas del arquitecto.

Con el sello Gaudí

Ya desde fuera la obra deja boquiabierto a todos los visitantes. Sus muros exteriores parecen jugar con el entorno gracias a unas formas hiperbólicas donde no existe la línea recta. “También impresionan los mosaicos que ornamentan el conjunto: especialmente las cruces en forma de X, puesto que nos interpelan con un lenguaje que nos atrae, pero no acabamos de comprender a ciencia cierta”, explican desde BCN+.

Cripta Gaudí / COLÒNIA GÜELL

Cripta Gaudí / COLÒNIA GÜELL

Cripta Gaudí / COLÒNIA GÜELL

Ya en el interior de la Cripta Gaudí, los ventanales de vidrios de colores dominan todo el espacio, y entran ganas de detenerse un rato a disfrutar de los dibujos que hace la luz al reflejarse sobre las piedras. “Aprovecha esos instantes de calma para admirar los bancos de madera, diseñados por Antoni Gaudí; las pilas de agua bendita, hechos con conchas marinas enormes procedentes de Filipinas; y las columnas inclinadas de basalto, tan imperfectamente bellas”, recomiendan.

Una cueva mágica

La Cripta Gaudí parece “una cueva mágica”, un espacio donde el arte y la naturaleza dialogan con libertad absoluta. Pero no hay que olvidar que la iglesia de la Colonia Güell es mucho más que una obra maestra del modernismo: es también una parroquia donde se celebran todo tipo de liturgias y son muchas las bodas, bautizos, funerales y misas que han tenido lugar bajo su ondulada cubierta.

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