Lo dice Unicef: los niños de Siria fueron sometidos a niveles de sufrimiento sin precedentes en 2016. La guerra civil en el país entra en su séptimo año.
La creciente crisis humanitaria y la situación extrema a la que se enfrentan los civiles ha provocado que cerca de 6 millones de niños dependan de ayuda para sobrevivir. El doble que en 2012.
Situación insostenible
2,3 millones de infantes sirios viven hoy como refugiados en Turquía, Líbano, Jordania, Egipto e Irak. “Tras seis años de guerra la situación de los niños de Siria es insostenible”, lamentó el director del Comité Español de Unicef, Javier Martos, este lunes.
“Casi 2 millones de niños están fuera de la escuela y se enfrentan a cosas que no deberían experimentar jamás”, dijo.
Marcados para toda la vida
El director regional de Unicef para Oriente Próximo y el norte de África, Geert Cappelaere, añadió que “la magnitud del sufrimiento no tiene precedentes”, y que “millones de niños son víctimas de ataques a diario y sus vidas están al revés”.
“Cada niño está marcado para el resto de su vida; esto tendrá consecuencias terribles para su salud, bienestar y futuro”, continuó. Al menos hubo 338 ataques contra instalaciones y personal médico en el país en 2016.
Matrimonios forzados
Los mecanismos de ayuda se están debilitando, según la agencia, que indica que las familias están adoptando medidas extremas para poder sobrevivir. Por ejemplo, forzar a los menores a contraer matrimonio o a trabajar.
A pesar de las circunstancias, Cappelaere ve “una gran valentía” en los niños sirios: “Insisten en seguir aprendiendo, incluso en escuelas subterráneas”. Solo los interesados en el conflicto tienen en su mano pararlo y evitar el sufrimiento de los niños.