Días convulsos en Canadá que recuerdan tiempos pasados. Mientras la web de inmigración del país colapsa por la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, la Armada investigará el hallazgo de una bomba atómica perdida en 1950 durante un simulacro de ataque a San Francisco: la Mark IV.
Un buzo asegura que ha encontrado la perdida Mark IV en la isla Pitt 60 años después. El arma, producida en 1949, desapareció el 13 de febrero del año siguiente cerca de Columbia Británica, durante un vuelo de entrenamiento de un Convair B-36 Peacemaker de la Fuerza Aérea estadounidense.
Orden de detonación
La aeronave, con 17 tripulantes --murieron 5--, perdió altitud tres horas después del despegue de Alaska a causa del hielo; sufrió el incendio de tres de los seis motores. La tripulación recibió entonces órdenes de detonar la bomba en el aire para evitar que cayera en manos soviéticas antes de saltar y dejar el B-36 en piloto automático.
En 1953, hallaron los restos del avión en el Monte Kologet durante una búsqueda aérea no relacionada. Se creía que había caído en el Pacífico.
Reconstrucción de la supuesta trayectoria del B-36 | CG
El Ejército de Estados Unidos siempre ha negado que utilizase una bomba atómica para esta prueba, ya que estaba llena de plomo y TNT, hecho que imposibilita una explosión nuclear.
La Mark IV pesaba cerca de cinco toneladas, medía 3,25 metros de longitud y tenía un diámetro de 1,5 metros. Existían 550 ejemplares. Era una versión mejorada y más segura de la Fat Man, detonada por Estados Unidos en Nagasaki (Japón) el 9 de agosto de 1945, y antecesora de la Mk6.