Eduardo Guerrero (d), director del Port Fòrum de Sant Adrià de Besòs
El Port Fòrum de Sant Adrià navegó aguas traicioneras en el pasado, pero ahora todo indica que cuenta con proyecto y equipo para despuntar. Si antaño carecía de visión, ahora parece que tiene una, y que sabe lo que quiere, cómo conseguirlo y en qué plazos.
Al frente del proyecto está Eduardo Guerrero, exdirectivo de Levi's que pasó del retail a la gestión de marinas deportivas. Ya enderezó la dársena de Premià de Mar, logrando que se convierta en un puerto amable y abierto a la ciudadanía.
De capital capitalino, la empresa busca ahora hacer lo propio con Port Fòrum, que antaño fue la marina maldita de Barcelona. Ahora, la dársena apunta a los tres millones de visitantes con una hoja de ruta que pivotará sobre el ocio familiar.
Puede funcionar o no, el tiempo -o el mercado- lo dirá, pero al menos es una idea ambiciosa. De las que echa en falta Cataluña de un tiempo a esta parte. Port Fòrum quiere aunar alojamiento con deporte, actividad náutica, gastronomía, medio ambiente y ocio soft.
Si lo consigue, se convertirá en referencia al norte de Barcelona, una de las pocas zonas en las que queda aún terreno para urbanizar. Podría ayudar a esponjar la Ciudad Condal y repartir la actividad económica por la franja litoral.
Se trata, pues, de una iniciativa empresarial que debe ser loada y apoyada. El mercado será el árbitro final de su desempeño, pero los mimbres son poderosos. La Cataluña de la represa necesita ideas y proyectos, y el Port Fòrum ha puesto uno sobre la mesa.
