Xavier Domènech

Aseguran estar muy tranquilos y que ya sabían la presión que se les venía encima. Catalunya en Comú, el nuevo partido impulsado por Ada Colau y que lidera Xavier Domènech, mantiene la equidistancia sobre el referéndum independentista porque es una guerra que no va con los comunes. Pero marcar distancia, lo saben, implica acercarse al "Estado opresor" --así lo dicen los secesionistas--. Y también lavarse las manos.

Tarde o temprano, la órbita podemita tendrá que tomar una decisión definitiva y decidir si sus alcaldes ceden locales municipales para celebrar el 1-O. Tienen lío interno y eso complica las cosas. Pero, de momento, no han sucumbido a las embestidas separatistas.