No son buenos tiempos para la concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona y presidenta de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), Mercedes Vidal. A media hora del inicio del pleno municipal de este viernes, los trabajadores del Bicing se unían a las puertas del consistorio increpándola y, minutos más tarde, entraban a la sala de plenos para continuar la protesta.
“Sal de la cueva, Mercedes, sal de la cueva” y “Sí se puede, tú no quieres”, gritaban los empleados, mirando a la concejal, mientras aguantaban una pancarta con el lema “Sueldos de miseria. Basta de precariedad”. Luego entraban los del metro y también le increpaban. Vidal no ha levantado la cabeza en ningún momento, mientras los concejales de los escaños más cercanos le daban palmadas en la espalda, en señal de ánimo.
Los trabajadores del Bicing increpan a Mercedes Vidal / CG
El grupo de Alfred Bosch (ERC) ha presentado una propuesta para pedir la dimisión de la concejal de Movilidad porque “ni siquiera cuando caían bombas en la Barcelona de la guerra civil se paró el servicio de metro”, ha dicho Bosch. Todos los grupos han votado a favor de que Vidal dimita. El problema --para ellos-- es que las propuestas no son vinculantes. Vidal continuará en su puesto.
