La consejera de Presidencia y portavoz del Govern, Elsa Artadi (c), junto a los responsables de Territorio, Damià Calvet (i), y del Interior, Miquel Buch (d) / EFE

La consejera de Presidencia y portavoz del Govern, Elsa Artadi (c), junto a los responsables de Territorio, Damià Calvet (i), y del Interior, Miquel Buch (d) / EFE

En voz baja

¿A qué juega Elsa Artadi?

4 septiembre, 2018 11:26

Elsa Artadi aspiró durante unas semanas a la presidencia de la Generalitat. Sus movimientos no gustaron al amado líder, el expresidente Carles Puigdemont, y fue relegada a la conselleria de Industria. Al final, y de carambola, asumió el departamento de Presidencia y se convirtió en la portavoz del Govern. Sin embargo, no está dispuesta a renunciar a mandar. Le consideran culpable de haber metido a Quim Torra en un jaleo monumental por su negativa a acudir a la inauguración de los Juegos del Mediterráneo, para luego envainársela tras las presiones que dirigió ella misma desde la sombra.

Ahora, en pleno discurso enardecido de Torra, Artadi se reunió en secreto con la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo. Del contenido de su conversación poco se sabe, más allá de la histriónica excusa de ir a Madrid para conocer a la número dos de Pedro Sánchez.

Por si fuera poco, Artadi se fue entusiasta a una entrevista a 8TV el día antes de la anunciada conferencia del president en que marcará las líneas maestras del independentismo en el nuevo curso político. “Ni la unilateralidad ni la desobediencia son nuestro escenario”, afirmó sin titubear en la cadena de televisión privada. Quitó hierro así a las manifestaciones previas del que se supone su jefe al alegar que sus referencias a la ruptura sin demora con el Estado eran una “manera política de hablar”. Y se quedó tan ancha. La pregunta es obligada ¿a qué juega Elsa Artadi?