El premio es de cinco cifras: 40.000 euros por jugar un solo partido. Incluso perdiéndolo. O embolsarse esa cantidad retirándose del encuentro después de disputar solo cinco juegos. En apenas 12 minutos. ¿Obscenidad? ¿Cobran demasiado los tenistas? ¿Llegan a final de mes mucho mejor que el común de los mortales?
La polémica se ha suscitado en Wimbledon durante estas dos semanas de torneo. En la primera ronda se retiraron ocho jugadores (si saltan a la pista ya tienen derecho a cobrar la cantidad estipulada por disputar un solo encuentro), dejando al público sin espectáculo y a otro jugador (de inferior ranking, eso sí), sin la posibilidad de disputar el torneo. La situación ha obligado incluso a los más afamados tenistas a mojarse.
Hacer números
Uno de estos jugadores no fue otro que el mismo Rafa Nadal, que dijo que detrás de las ganancias hay cuantiosos gastos que asumir. Sí, los hay. Y obligan a más de un tenista a hacer números para ver si puede jugar o no un torneo.
¿Cuánto gana un tenista? En un Grand Slam un jugador que llegue a disputar la primera ronda se embolsa en torno a 35.000 euros. Si se trata de un Masters 1.000, siguiente campeonato por orden de importancia, la cantidad ronda los 15.000 euros. Si es un ATP 500, 10.000 euros. Y si es un ATP 250, la cifra baja a los 6.000 euros.
Rascarse el bolsillo
¿Y cuánto gastan? De su bolsillo cada tenista tiene que pagar, impuestos aparte, tres grandes conceptos: vuelos, hoteles y entrenador (y fisioterapeuta). En primer lugar, los desplazamientos los pagan íntegramente, con el hándicap de que nunca pueden reservar el vuelo de vuelta a casa porque no saben cuándo perderán.
Federer es uno de los tenistas que más gana / EFE
En cambio, el alojamiento va a cuenta de cada torneo, pero con dos salvedades; si el jugador necesita más de una habitación (entrenador, fisioterapeuta, familia, etcétera), es problema suyo. Y si el tenista aterriza días antes de que arranque el torneo, más de lo mismo.
Por último, la cuestión del técnico. Puede tener un sueldo muy variable, pero muchos rondan una media de entre 5.000 y 10.000 euros al mes. Y el ‘fisio’, unos 3.000 euros.
Cuenta de resultados
Así que, haciendo cuentas, es fácil llegar a la conclusión de que, en ocasiones, un jugador que no avanza lo suficiente en un torneo apenas logra cubrir los gastos con lo obtenido. Sí, Rafa Nadal y Roger Federer llevan ganados, solo en este 2017, más de seis y cinco millones de euros, respectivamente. En cambio el jugador de tenis número 50 del mundo ha conseguido unos 340.000 euros, para lo que ha tenido que jugar 15 campeonatos viajando a lo largo de tres continentes diferentes.
Por su parte, el tenista situado en el puesto 100 del planeta, ha logrado 230.000 euros tras desplazarse a once países de cuatro continentes diferentes para jugar en 16 torneos. Es decir, muchos aviones y muchos hoteles. Calculadora en mano, quizás no es oro todo lo que reluce y vivir del tenis no sea tan fácil ni tan común como parece.