Paulinho es el nombre que más se repite en las oficinas del Camp Nou. A inicios de esta semana el club azulgrana recibió una oferta muy suculenta de la Premier League, donde el centrocampista brasileño está considerado todavía como un jugador de gran nivel.
Pese a que no estaba en la lista de salidas de este mercado veraniego, el Barça medita su salida por varias razones. La edad del brasileño --cumplirá 30 este julio-- y el precio que ofrecen por sus servicios. Mayor que el club catalán desembolsó por él ahora hará un año. La liga inglesa es una de las mejores opciones para un futbolista si aún quiere rendir al máximo nivel, pero su exequipo, el Guanghzou Evergrande, se ha entremetido en las negociaciones y habría puesto sobre la mesa 50 millones de euros para rehacerse con sus servicios.
Ajeno a los movimientos
De momento, el centrocampista brasileño no se ha manifestado sobre los rumores que circulan alrededor de su futuro. Está plenamente concentrado en el Mundial y el partido de esta viernes frente a Bélgica. Sí es cierto, que nunca ha conseguido un puesto fijo en el 11 inicial azulgrana y la en China es considerado un ídolo. Además, su masa salarial se vería de nuevo incrementada notablemente.
Sería una amortización perfecta del jugador. Además, su salida dejaría una plaza de extracomunitario libre. Algo que escasea en el Barça y que puede condenar al recién llegado Yerry Mina a salir del club.
