La sorpresiva detención de Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, en la ya conocida trama Soule en el marco de una operación anticorrupción que investiga posibles delitos de administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares, falsedad documental y posible alzamiento de bienes ha dejado en una delicada situación al fútbol español.
Horas después de la detención de Ángel María Villar, la RFEF expresó en un comunicado su decisión de aplazar sin fecha la asamblea prevista para este jueves donde se iban a sortear los calendarios correspondientes a La Liga, la Segunda División y Segunda ‘B’. “Las reuniones de los órganos señaladas para los días 19, 20 y 21 de julio de 2017 quedan aplazadas hasta nueva fecha” se podía leer en un escueto comunicado oficial.
Paralizado sin poder conocer la agenda de la nueva temporada, el fútbol español vive una complicada situación que ya ha provocado el conflicto entre la RFEF y La Liga por un calendario que debe fijar, entre otras cosas, las fechas definitivas de una Supercopa que debería disputarse en menos de tres semanas y que todavía no tiene ni horario ni día.
Conflicto abierto
Javier Tebas, presidente de la Liga, ya ha expresado su voluntad de que el sorteo del calendario se lleve a cabo este jueves o viernes a pesar de la decisión de la RFEF, quien se reitera en su posición de no ceder dichas responsabilidades a la organización del campeonato.
Otro de los organismos implicados, como es el Consejo Superior de Deportes (CSD), también ha expresado su voluntad de que el sorteo del calendario siga adelante para evitar que se produzcan todavía más demoras en un calendario que esta temporada será todavía más complicado de cuadrar con la disputa del Mundial de Rusia este próximo verano.