Setien, en una rueda de prensa con el Barça | EFE

Setien, en una rueda de prensa con el Barça | EFE

Primer equipo

Así fue el primer discurso de Quique Setién a la plantilla del Barça

El nuevo técnico culé dedicó unas sinceras palabras a los futbolistas en su estreno

21 enero, 2020 00:06

A Quique Setién seguramente le costará olvidar el partido del pasado domingo ante el Granada. Y es que el nuevo técnico culé vivió su partido número 500 como entrenador, y lo hizo en su estreno en el banquillo del Camp Nou.

Una noche histórica que además se saldó con un sufrido triunfo ante los nazaríes, y que sirivó para demostrar a los aficionados azulgranas algunas ideas de a lo que quiere que juegue el equipo. El santanderino vivió un día importante y cumplió un "auténtico sueño", tal y como él mismo explicó días antes. 

Quique Setién dirige su primer partido con el Barça

Quique Setién dirige su primer partido con el Barça

Quique Setién dirige su primer partido con el Barça

Sin embargo, su mano no solo se notó en el terreno de juego, sino también en el vestuario, donde Setién protagonizó un sincero discuro a sus jugadores instantes antes del inicio del encuentro, según avanzó el programa Què t'hi jugues de la Cadena Ser. 

Disfrutar del fútbol y de la vida

Poco más de diez minutos le hicieron falta a Quique Setién para motivar a sus jugadores antes del partido contra el Granada. Un discurso simple y cercano, donde explicó a los jugadores que "le gustaba disfrutar del fútbol y de la vida", en el sentido que quería disfrutar viéndoles jugar. 

Por otra parte, les recordó que, aunque "le gusta mucho hablar, cada uno tiene que estar en su sitio". Y hubo tiempo también para las bromas. En concreto, el técnico se refirió a su segundo, Eder Sarabia, como una persona "con mucho ímpetu y sangre caliente", lo que despertó las risas de los futbolistas. 

Setien, en su estreno en el banquillo del Barça | EFE

Setien, en su estreno en el banquillo del Barça | EFE

Setien, en su estreno en el banquillo del Barça | EFE

Messi fue de los jugadores que más lo disfrutaron, como se pudo ver en su sonrisa. En cambio, Piqué estuvo mucho más serio. No obstante, desde el club están convencidos que fue la decisión correcta, y que con sus métodos, acabará ganándose a todo el vestuario.