El disparo que supone el primer gol del Eintracht al Barça

El disparo que supone el primer gol del Eintracht al Barça EFE

Primer equipo

La historia se repite: el Eintracht vuelve a conquistar el Camp Nou en 45 minutos muy calientes

El equipo alemán supera al Barça por la mínima y planta una muralla defensiva para complicar las cosas en el reencuentro del estadio de Les Corts con la Champions League

Llegir en Català
Publicada
Actualizada

Noticias relacionadas

La Champions League volvía al Camp Nou 1.505 días después. Y no podía ser contra otro rival que ante el Eintracht de Frankfurt, el mismo equipo cuya afición invadió el estadio en 2022 con más de 30.000 aficionados en un partido de Europa League. Como si el FC Barcelona no se pudiese despegar de esos fantasmas que le persiguen a nivel continental.

Eso intentó el Barça en los primeros minutos, sin Frenkie de Jong, pero con Éric García en la medular y Gerard Martín en el eje de la zaga. El equipo de Hansi Flick salía como ante Atlético y Betis, concentrado, tirando la línea de manera acertada y con un gol anulado a los 10 minutos por un fuera de juego milimétrico, en que Raphinha conectó de maravilla con Robert Lewandowski.

El Eintracht asusta

A pesar de los buenos minutos iniciales, el Barça notó rápidamente que la Champions League no es la Liga. Que la competición es más dura y el Eintracht necesitaba puntos para salir del pozo. Sin claridad en los últimos metros, el conjunto alemán salió en un contragolpe de la mano de su lateral zurdo Nathaniel Brown, ojeado por todo grande. Y con campo por delante encontraba a Knauff, que protegía el balón frente a Alejandro Balde y definía con un disparo cruzado que superaba a Joan García.

El Eintracht celebra el gol en el Camp Nou

El Eintracht celebra el gol en el Camp Nou EFE

La afición del Eintracht enciende una bengala en el nuevo Camp Nou

La afición del Eintracht enciende una bengala en el nuevo Camp Nou EFE

Empezaba el susto europeo, con la afición alemana encendiendo bengalas en la inédita grada visitante del Camp Nou. El desacierto continuaba en el 25', cuando de la misma manera que había encontrado el gol --en offside--, con un centro lateral, Koundé hallaba a Fermín. Su disparo desde el corazón del área topaba con una pierna rival. Iba dentro.

Muralla defensiva

Y es que lo que se encontró el Barça tras el gol teutón fue una muralla, una línea de cinco y otra de cuatro un poco más adelante muy difíciles de batir. El planteamiento de Dino Toppmöller era justamente este. El Eintracht dejó sin espacios a Lamine Yamal para buscar el uno contra uno y sacar la varita mágica a pasear.

Lamine Yamal intenta regatear a un jugador del Eintracht

Lamine Yamal intenta regatear a un jugador del Eintracht EFE

Flick lo intentó cambiando de bandas a Fermín, con una marca individual, por Raphinha, pero ni con esas encontró la fórmula. Por dentro, el equipo teutón cerraba muy bien los espacios y le hacía la vida imposible a Lewandowski. De las botas de Pedri y de imaginación de Lamine Yamal deberá nacer la remontada azulgrana ante un Eintracht que al espacio no paraba de amenazar.