
Frenkie de Jong durante el Getafe-Barça de Liga FCB
Los males de Frenkie de Jong también condenaron al Barça en Getafe
Hansi Flick apostó por el centrocampista neerlandés para desencallar el partido, pero volvió a ser intrascendente
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Flick apostó por De Jong. Durante el Getafe-Barça que acabó en tablas en el marcador (1-1), el primer cambio fue Marc Casadó. El entrenador alemán no estaba contento con lo visto en la primera parte, cuando el mediocentro catalán apostaba por situarse por delante de los centrales, entre líneas.
Frenkie salió por Casadó en el minuto 45. Flick colocó al centrocampista holandés en salida de balón. No fue su peor partido, pero no solucionó los problemas del Barça para abrir un hueco en la muralla defensiva que planteó el Getafe de José Bordalás. De Jong casi marcó, con un disparo desde fuera del área, pero, más allá de eso, no fue trascendente.

Marc Casadó pasa un balón durante el Getafe-Barça de Liga FCB
El punto fuerte de Frenkie son las conducciones con el balón. Por ello, Flick lo situó como tercer central, donde podía ver todo el campo contrario de cara, sabiendo que tiene problemas para recibir la pelota de espaldas. Aún así, jugó incluso demasiado retrasado. El Getafe ni presionaba y no hacía falta sumar un efectivo más entre los defensas.
Intrascendente
La situación ideal hubiese sido que De Jong se colocase algo más arriba para, con un control orientado, superar las líneas del Getafe, que ya estaban muy retrasadas. Sino, el único recurso que le quedaba era el de iniciar una conducción. Cuando lo intentó, lo hizo con potencia.
Así logró hacer más daño al cuadro madrileño. Mucho más que con los pases. Al final, Frenkie acabó perdiendo bastantes balones. Flick posicionó a De Jong como mediocentro porque una de sus grandes armas también es el desplazamiento en largo. Sin embargo, no se aprovechó esta cualidad.
Con el mediocentro neerlandés en el campo, el Barça volvió a pinchar. Cuando participa en los partidos, y debe coger protagonismo en ellos, el equipo de Hansi Flick no suele ver la victoria. El Getafe-Barça fue una prueba más de ello.