A falta de dos jornadas para concluir la fase de grupos, solo Bayern Munich, Liverpool, Juventus y Ajax tienen asegurado su pase a los octavos de final de la Liga de Campeones. Cada uno de ellos ha sumado cuatro victorias en las cuatro jornadas que se han disputado. El Chelsea, vigente campeón, con nueve puntos es el único segundo que prácticamente también ha puesto un pie en la siguiente ronda. El Barça, no.

El Barça tiene la obligación de ganar mañana al Benfica en el Camp Nou. Es otra final para el equipo azulgrana, que es segundo con seis puntos, dos más que su próximo rival, pero con un pésimo promedio goleador. En cuatro jornadas, el Barça solo ha sido capaz de marcar dos goles, todos ellos ante el rival más débil del grupo (Dinamo Kiev), y, en cambio, ha sido goleado en el Camp Nou por el Bayern (0-3) y en Lisboa por el Benfica (3-0).

La poca eficacia goleadora barcelonista, también notoria en el campeonato liguero, coincide con las facilidades que ofrece el equipo defensivamente. Son los dos aspectos principales del juego que más deben tener preocupado a Xavi Hernández. El Barça siempre se había distinguido por su capacidad ofensiva. La perdida de Luis Suárez, primero, la de Leo Messi después y más tarde la de Griezmann dejaron al equipo sin una de sus más importantes cartas de presentación que metían el miedo en el cuerpo de los adversarios. Además de estas bajas, el Barça no ha podido contar con Ansu Fati ni tampoco con Dembélé, jugadores con buen olfato goleador que podrían aumentar el poderío ofensivo, hoy solo representado por Memphis Depay.

Todos sabemos que con el nuevo entrenador hay que tener paciencia. Seguramente Xavi conseguirá que sus futbolistas logren mover el balón a mayor velocidad y que los centrocampistas sepan que tirar a puerta no está prohibido. La victoria es necesaria contra el Benfica. Dará igual cómo se consiga, porque lo verdaderamente importante es plantarse en los octavos de final de la Champions. Y el empate no sirve porque dejaría la clasificación en bandeja al equipo portugués que en la última jornada recibirá al Dinamo de Kiev, mientras los azulgrana visitarán el campo del Bayern.