Que a dos años vista de las próximas elecciones a la presidencia del Barcelona ya haya aparecido un aspirante a sustituir a Josep M. Bartomeu hasta cierto punto viene a decir que la actual junta está haciendo las cosas bien. Porque sino díganme ustedes quién es el guapo que va a querer meterse en un club supuestamente sin dimensión en las redes sociales, económicamente mal aprovechado, que desperdicia el talento y que practica un juego que socialmente no es aceptado.

La irrupción de Víctor Font creo que es buena en el sentido que hará que la actual junta directiva del Barça mejore aún más. Las oposiciones bien preparadas siempre han impulsado a la mejoría sustancial de quien está en el poder.

Un competidor de peso, y Font está convencido de serlo y demuestra que si algo tiene es dinero para aguantar dos años de campaña, obliga a una exigencia mayor por parte de los gobernantes actuales. Al mismo tiempo impone que otros posibles candidatos se pongan las pilas para presentar sus credenciales. Como también todos estos movimientos por la presidencia exhiben la salud democrática de la institución.

¿Ahora bien, qué tipo de campaña hará el único candidato conocido para las elecciones del 2021? ¿Será agresivo? ¿Intentará torpedear todo lo que haga la actual directiva? ¿Pondrá todos sus medios para mantener la falsa teoría de que el actual Barça ha perdido la esencia inculcada por Cruyff?

Todos conocemos historias parecidas en el Barça, y muchas más en la política. Todos sabemos que para llegar al poder sí que vale todo, hasta el juego sucio. Creo sinceramente que Font, o sus consejeros, tenían que haberse guardado cartas para la recta final de la campaña. Porque una cosa es comprometer hoy a Xavi Hernández como vicepresidente o entrenador del futuro y otra es presentarlo como factor sorpresa en la última o penúltima jugada. Dos años son muchos años y todo puede cambiar. Por otro lado extraña que Font haya tocado temas deportivos cuando el equipo está jugándose la temporada. Aunque todos sabemos que Leo Messi no será eterno y que algún día se retirará, desconozco cómo cayó en el vestuario la noticia de que un aspirante a presidir el Barça esté ya jubilando al argentino. O que hable de recuperar la esencia de Cruyff unas horas después que el Barça logra una remontada con un sexto gol que cautivó a todo el mundo por su belleza. No me gustó tampoco que Font de a entender que en las redes sociales el club es poca cosa cuando es líder mundial en interacciones. En cualquier caso habrá que esperar a ver que más ofrece el futuro de Font.