El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha condenado a España a indemnizar con 32.000 euros a María Isabel Garrido Herrero, la madre de una niña de Orihuela (Alicante) que murió en 2013 con seis años como consecuencia de un fallo en un respirador artificial.
El Tribunal de Estrasburgo dio la razón a Garrido Herrero, que había denunciado que la justicia española no investigó de forma apropiada las causas de la muerte de la pequeña Marina.
Cierre del caso
En su dictamen, los jueces europeos señalan que la investigación duró cinco años y que fue finalmente abandonada en 2019 al superarse el plazo dado para la determinación de esas causas del fallecimiento una vez que expiró el tiempo para fijar una eventual responsabilidad penal.
La niña quedó tetrapléjica como consecuencia de un accidente de tráfico en marzo de 2010 y fue conectada a un respirador, pero como consecuencia de un fallo en el sistema de respiración asistida, entró en coma después, hasta su fallecimiento en 2013.