Triste noticia para el mundo del deporte. El árbitro Lucas Vicente Vida, que se ganó el cariño de toda España por parar un partido y atarle las botas a un niño, ha fallecido en un acidente de tráfico.
El joven de 20 años perdió la vida el pasado viernes en el trágico incidente, cuando su vehículo impactó con un camión que llevaba pinos en Ponteceso (Coruña). Tras el choque, el camión arrastró el turismo cuesta abajo unos 30 metros y el coche se quedó encajado debajo del furgón.
Accidente
El chico fue portero del equipo juvenil del Corme, que ganó liga y copa, y ahora árbitro en la Costa. El suceso fue confirmado horas después por parte de la Federación Gallega de Fútbol a la que el jugador había pertenecido, primero como futbolista y ahora como colegiado.
"Desde la RFGF acompañamos en el dolor a su familia. El fútbol gallego guardará un minuto de silencio en su memoria y los jugadores portarán un brazalete negro", apuntaron desde el organismo.
Tierno gesto
En el accidente, Lucas quedó atrapado en el interior de su coche y tuvo que ser rescatado con material especializado por parte de los bomberos. Una vez liberado, los servicios de emergencia sanitaria intentaron reanimarlo, pero ya era demasiado tarde y el joven había fallecido.
El árbitro se dio a conocer con un tierno gesto que tuvo con un niño en un partido. Al pequeño se le desataron los cordones de las botas y el chico se agachó para atárselos. Acto seguido, el menor le abrazó. Una imagen que se hizo viral por los valores de respeto en el deporte que transmitía.