Las autoridades buscan a Lucia Marín Lara, una adolescente de 15 años, desaparecida desde el lunes 22 de noviembre en la Pobla de Farnals (Valencia) y que llamó en la noche del martes a su madre. La joven se comunicó con su familia a las 21:15 horas desde un número oculto.
En la llamada, la menor pidió a su progenitora que la fueran a buscar. Sin poder precisar el lugar en el que se encontraba, les dijo que estaba en Valencia y que se sentía mal. Acto seguido, alguien le quitó el teléfono.
Llamadas desde número oculto
Si bien, esa misma noche la madre recibió varias llamadas, todas ellas sin respuesta. De hecho, según cuenta a Levante-EMV, cuando descolgaba el teléfono, tan solo escuchaba respirar a alguien al otro lado.
Los hechos ya han sido puestos en conocimiento de los agentes de la Guardia Civil de Massamagrell, quienes investigan si se trata de un secuestro o de una desaparición voluntaria. Una hipótesis que cobra fuerza después de que haya trascendido que no es la primera ocasión en que Lucía se escapa y que, el mismo día en que se perdió la pista, desaparecieron 250 euros de la casa.
Sus últimas horas en casa
Por su parte, la familia sostiene que la joven ha sido engañada y pide la colaboración ciudadana para dar con su paradero. Al parecer, en los últimos meses había estado bajo tratamiento psicológico tras haber sufrido acoso escolar.
La última vez que la mujer habló con su hija fue al mediodía. En ese momento, la joven todavía estaba en casa y le explicó a su madre que apenas tenía ganas de comer. Horas más tarde, se le perdió la pista. La última conexión de su teléfono móvil fue registrada a las 17:30 horas.