Un ataque informático contra el proveedor de almacenamiento y transporte acondicionado Bakker Logistiek ha dejado sin queso a un sinfín de supermercados. Concretamente, los ciberdelincuentes han secuestrado los datos de la empresa --un ransomware-- al infectar su sistema operativo.
El alcance del ciberataque se limita a los supermercados holandeses, aunque la escasez del producto es tan exagerada que la mayoría de los establecimientos tienen las estanterías vacías. Y lo peor de esta tragedia es que la solución podría ir para largo.
Escasez de queso preenvasado
La empresa Bakker Logistiek es uno de los proveedores de servicios logísticos más grandes de los Países Bajos, pero lleva una semana luchando contra un ataque informático que los ha dejado a ciegas. El ciberataque cifró todos los dispositivos de su red, lo que ha interrumpido por completo el transporte de alimentos y demás operaciones.
Esta situación ha provocado una escasez de ciertos productos alimenticios, especialmente queso, en la cadena de supermercados más grande del país: Albert Heijn. Una realidad que ha obligado a la propia a emitir un comunicado advirtiendo de la disponibilidad limitada de queso preenvasado.
Ataques a almacenes acondicionados
"Debido a un mal funcionamiento técnico, la disponibilidad del queso preenvasado es limitada. El proveedor de servicios de logística trabaja arduamente para resolver el problema lo más rápido posible y restaurar rápidamente la disponibilidad. Pedimos disculpas por las molestias", publicó la dirección de Albert Heijn en su página web. Mientras, Bakker Logistiek trabaja en restaurar los sistemas afectados a partir de copias de seguridad: "No podíamos recibir pedidos de los clientes. En nuestros almacenes, ya no sabíamos dónde estaban los productos", asegura el director de Bakker, Toon Verhoeven.
"Son almacenes muy grandes, no se busca simplemente un palé. Tampoco pudimos planificar nuestros transportes... tenemos cientos de camiones, y tampoco se pudo hacer a mano", zanjó Verhoeven. Una situación muy parecida a la que vivió el pasado mes de noviembre otro operador de almacén acondicionado, Americold, después de sufrir el mismo ataque informático que Bakker Logistiek.