El tiburón que entró durante la mañana del lunes 30 de marzo en las cristalinas aguas de Cala Galdana, en Menorca, ha aparecido muerto en el torrente que desemboca en la misma playa.
Se trata de un ejemplar de tintorera, un escualo común en el Mediterráneo, que mide casi dos metros y pesa alrededor de 80 kilos.
Una visita de tres días
Pasadas las 11 de la mañana del 30 de marzo, el animal fue avistado por primera vez a escasos metros de la arena de Galdana, una de las calas con mayor afluencia de visitantes en la isla y que está ubicada en la costa sur. Tras darse el aviso de la visita del tiburón, la Policía Local de Ferreries y los agentes de Protección Civil prohibieron el baño en la playa.
Previo a la llegada de los agentes, una multitud de curiosos se acercó hasta la orilla del mar para difundir imágenes y vídeos del animal, que se ha convertido en la mayor atracción de la zona en estos últimos días.
Roban el cuerpo de la tintorera sin vida
No obstante, tras más de 48 horas en la cala, la tintorera ha aparecido muerta. El cuerpo del escualo fue encontrado a las 17 horas del miércoles 31 de marzo, aunque previamente ya se le pudo ver moribundo por las aguas del riachuelo de Cala Galdana.
La retirada del tiburón estaba prevista que se llevase a cabo a las 8 de la mañana de este jueves 1 de abril. Sin embargo, la Policía ha dado a conocer que el cuerpo sin vida del ejemplar ha sido sustraído de madrugada.