Las intensas lluvias de las últimas horas han provocado el desprendimiento de un carril en el punto kilométrico 185 de la autovía A-67 y el corte de esta vía desde Polanco (Cantabria) en sentido (Cantabria) Torrelavega y Asturias. Cientos de conductores han quedado atrapados, con varias horas en sus vehículos por el tapón ocasionado.
Según la Delegación del Gobierno, el socavón (producido de madrugada) ha motivado el corte del tráfico y el desvío por las carreteras N-611 y CA-330 desde el enlace de Polanco. En efecto, las tareas de reparación y reconstrucción han comenzado de inmediato, aunque la vía, donde se realizaban obras de ampliación, no reabrirá antes del jueves.
El delegado del Gobierno en Cantabria, Eduardo Echevarría, ha sugerido a los conductores que eviten esa carretera. Se han registrado hasta siete kilómetros de retención en algunos puntos. La circulación es lenta por cualquiera de las vías alternativas, mientras los afectados denuncian que, si el socavón (de 20 metros de largo) se registró a las cinco de la madrugada, podían haber avisado de ello para evitar este desastre.