Una anciana de 85 años ha fallecido en Australia tras ser atropellada por su propio automóvil. Mientras intentaba aparcar, en un espacio reducido, la mujer pidió ayuda a otro hombre de 72 años que pasaba por ahí. Al bajar del vehículo para que el hombre le ayudara a dar marcha atrás, el vehículo retrocedió por sí mismo.

Fue entonces cuando el coche golpeó a la mujer y cayó al suelo atropellándola posteriormente. La mujer fue trasladada a un hospital, donde falleció horas más tarde. Las causas del accidente están siendo investigadas.