La Pizzería Firenze de Valencia, ha causado una gran indignación en las redes sociales después de que se diera a conocer su comportamiento frente a un grupo de clientes en silla de ruedas. El Centro de Día Velluters intentaron reservar el día 12 de enero una mesa para acudir a una actividad de ocio y tiempo libre habitual para personas mayores y con discapacidad del centro. Cuando procedieron a realizar la reserva y explicaron las necesidades de los comensales el dueño afirmó que le venía "mal" que fueran personas en silla de ruedas porque "era un lío" y porque temía perder a sus clientes habituales.
Denuncia pública
La asociación interpusó iuna reclamación ante la Consejeria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo tras recibir la negativa del local. Los hechos también han sido denunciados por la Confederación de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunitat Valenciana (Cocemfe CV). En un comunicado, han expresado su rechazo hacia tales comportamientos y han asegurado que seguirán trabajando para "sensibilizar a la sociedad sobre sobre la igualdad en derechos de las personas con discapacidad para romper las barreras actitudinales que todavía perviven en la sociedad".
El presidente de la Cocemfe CV, Javier Segura, ha lamentado que estos hechos aun tengan cabida en la sociedad de hoy en día y ha remarcado que "suponen para quienes los sufren una afrenta especialmente dolorosa" que "atenta al derecho a participar en igualdad de condiciones en la vida de la comunidad".