Un pelo en la sopa estuvo a punto de acabar en tragedia. Las cámaras de seguridad de un restaurante de Taiwán grabaron una escena estremecedora. En el local, varias personas compartían mesa. Una joven de melena larga y negra, recibió la visita de otro comensal que decidió sentarse cerca de ella.
El hombre de 57 años, acusó a la joven, de 33, de que cuando se sentó, introdujo parte de su pelo en la comida, algo que el hombre consideró de mala educación y falta de higiene.
La mujer aseguró que ella no había sido, y el hombre, alterado, decidió agredir a la chica. Lanzó la sopa china que acaba de comprar al rostro de la joven que sufrió quemaduras en la cara.