Una mujer de 37 años ha sido detenida en Seúl, Corea del Sur, después de, presuntamente, estrangular a su hija de cinco años hasta la muerte. La policía recibió una llamada de emergencia alertando de lo que había ocurrido en el domicilio.
El padre de la menor y marido de la detenida encontró a su mujer realizando un rito exorcista con el que pretendía "expulsar a los malos espíritus" del cuerpo de la menor.
La madre, identificada como Choi, confesó que vio el rito en una película de televisión por cable. La mujer también pensó que realizar el exorcismo podría curar los trastornos del desarrollo que afectaban las facultades del habla de su hija, según los investigadores.
Según el historial médico, en el pasado la detenida había visitado una clínica para trastornos mentales, pero su caso no fue considerado lo suficientemente grave como para diagnosticar.