Un joven denunció el pasado martes la desaparición de su novia en una zona boscosa de la ciudad de Atlanta, Estados Unidos. Tras dar la descripción gráfica de su pareja, la policía inició su búsqueda, pero tras varios días sin éxito decidió empezar su propia investigación.
El joven utilizó la aplicación de rastreo de su teléfono celular para encontrar el teléfono de su pareja y así, quizás poder encontrarla. La tecnología funcionó y pudo dar con la chica, pero desafortunadamente, encontró su cadáver.
La geolocalización le llevó hasta una zona montañosa donde encontró el teléfono y la ropa de la chica. A escasos metros, encontraron el cuerpo sin vida de la joven.
Según fuentes policales, el cadáver presentaba signos de trauma. Las autoridades han informado de que el sujeto no es considerado como sospechoso y que está cooperando en la investigación. Las identidades del hombre y de la víctima no se han hecho públicas.