Los Mossos d'Esquadra han desarticulado una banda criminal formada por cinco hombres acusados de ser los presuntos autores de doce robos en tiendas de centros comerciales en el área de Barcelona. Los ladrones, especialistas en este tipo de delitos, actuaban empotrando uno de sus coches contra los accesos de los establecimientos.  



Según la policía catalana, el grupo robó en tiendas de teléfonos, de ropa de marca, perfumerías e incluso una joyería. En uno de estos asaltos llegaron a sustraer un reloj con un valor superior a los 50.000 euros, además de productos de telefonía valorados en 35.000 euros.



Los Mossos iniciaron la investigación en el mes de abril de 2017 a raíz de un robo en una empresa de conservas en Llinars del Vallès, Barcelona, en el que tres hombres forzaron la puerta y se llevaron una caja fuerte que contenía dinero en efectivo y joyas. Días más tarde, los agentes encontraron una furgoneta calcinada que contenía la caja sustraída.

Modus operandi

Antes del robo, el grupo sustraía un vehículo que después utilizaban para efectuar su cometido. Después, abandonaban el coche y pasaban a vender los productos en el mercado negro.

Los cinco detenidos pasaron a disposición judicial el pasado 22 de enero y el juez decretó para dos de ellos el ingreso en prisión y el resto quedó en libertad con cargos.