Dos policías de la ciudad de Toronto, Canadá, han sido expedientados tras protagonizar una escena algo paradójica. Los agentes llamaron a comisaría para solicitar refuerzos por radio mientras realizaban un operativo. Cuando los refuerzos llegaron, ambos se encontraban en el coche patrulla tumbados y drogados.

Según los medios locales, ambos policías consumieron marihuana comestible y fue entonces cuando los oficiales comenzaron a tener alucinaciones. Uno de ellos, asustado, decidió pedir ayuda. 

El día anterior a los hechos se había realizado un operativo antidroga en la región, aunque de momento se desconoce si los agentes participaron en en él. los hechos se están investigando por incumplimiento de las normas profesionales.