Un piloto de la aerolínea British Airways fue arrestado segundos antes de que despegará al mando Boeing 777 desde el aeropuerto de Gatwick, Londres, con destino las Islas Mauricio. Compañeros de la tripulación sospecharon que el piloto estaba bajo los efectos del alcohol así como también algunos pasajeros que llegaron a oler el fuerte olor a alcohol que el hombre desprendía.
La tripulación llamó a las autoridades por teléfono y de inmediato los agentes obligaron a detener la aeronave. El avión iba con 300 pasajeros a bordo. El suceso provocó un retraso de más de dos horas debido a la dificultad para encontrar un piloto de reemplazo.
Un portavoz de la aerolínea ha asegurado que el tema es "muy serio" y que ya se han iniciado investigaciones y han prestado su total colaboración con la policía en la investigación.