El modelo James Brindley, de 26 años, murió el 26 de junio de 2016 después de ser apuñalado en el corazón por dos jóvenes en la localidad de Aldridge, Reino Unido.
El joven tuvo tiempo de mandar un WhatsApp a su novia alertándola de la situación: "Acaban de apuñalarme. Dos segundos, llamo a una ambulancia". Segundos más tarde se derrumbaró en el suelo, mientras su novia le preguntaba: "James, por favor, dime que estás bien. ¿Necesitas que llame a tus padres? Tengo miedo de llamar por teléfono, ¿has llamado a una ambulancia?".
James solo pudo dar unos pasos más y cayó a tan solo 400 metros de la casa de sus padres. Durante la celebración del juicio, que todavía continúa, uno de los agresores, de 17 años, admitió haber apuñalado al joven en el corazón, pero aseguró ante el tribunal de Birmingham que juzga el caso que fue en defensa propia.
Sin embargo, los testigos señalaron que fueron los atacantes los que se comportaron de manera agresiva con Brindley.