Diez personas han sido ejecutadas este domingo en la ciudad de Lufeng, China. Los fallecidos fueron juzgados de forma pública ante más de 10.000 personas en el estadio de Donghai, donde fueron sentenciados a muerte por narcotráfico, asesinato y robo.  El medio chino Beijing News ha publicado en su cuenta de Weibo una serie de videos en los que se muestra la ejecución de diez de los doce juzgados.

Las ejecuciones fueron realizadas en un lugar privado que se habilitó para ese fin, después de sentenciarlos delante de miles de personas. China ha defendido las ejecuciones con un solo fin: advertir a la población de las consecuencias que acarrea el tráfico de drogas, un delito penado con la muerte en el país asiático.

En 2015 se ejecutó en el mismo sitio a trece personas por el mismo delito y hace menos de un año, ocho personas fueron también ejecutadas.