Sarah Illig es una joven que realizaba snorkeling durante su luna de miel en el Caribe cuando de repente un tiburón la atacó mordiéndola en el brazo. El vídeo, que fue grabado por su marido, se ha hecho viral en países anglosajones además de las fotografías de sus heridas.

Illig, que confesó que en un principio pensó que era una broma de su marido, ha afirmado que "menos de un segundo después me di cuenta de lo mucho que dolía y miraba hacia atrás, donde mis gafas bloqueaban mi visión lateral para ver al tiburón".

La pareja aseguró que no provocó al anima ni le dio de comer. "Fue un accidente fortuito que no provocamos nosotros",