Una mujer fue arrastrada por el andén del metro de Roma, Italia, el pasado miércoles tras quedar atrapada en una de las puertas del convoy. El conductor, Gianluca Tonelli, comía mientras conducía y no se percató de que una mujer había quedado atrapada en el último vagón al cerrarse las puertas.
La víctima fue arrastrada por todo el andén hasta que chocó con la pared del túnel. Todos los presentes en la estación empezaron a chillar y a alertar al conductor, pero no se dio cuenta.
El estado de la mujer es grave, aunque los médicos no temen por su vida. La secuencia del vídeo muestra la impotencia de los pasajeros al no poder ayudar a la víctima y ver cómo impactaba violentamente contra la pared.
Los responsables del metro de Roma han suspendido al conductor por el grave despiste y tras visionar el vídeo por las 11 cámaras de seguridad la policía local ha abierto una investigación.
El conductor, por su parte, dice sentirse “humillado” por la publicación de la prensa y lo achaca todo a la mala suerte. La mujer, una bielorrusa de 43 años, permanece en cuidados intensivos del Hospital General Tor Vergata, con magulladuras en el cuerpo y la cara. La víctima ha confesado que “sólo sé que iba en el metro, oí gritos y entonces ya no recuerdo nada. Abrí los ojos y me encontré aquí”. Las puertas se cerraron antes de que ella pudiera entrar por completo y quedó agarrada a la puerta por una mano y el bolso.
Tal y como se aprecia en el vídeo, el único que intentó salvar a la mujer fue uno de los vigilantes, pero no consiguió liberarla.