Daniil Medvedev fue protagonista de una de las acciones más polémicas del torneo de tenis de Wimbledon (Reino Unido). Tras caer en la segunda ronda del Grand Slam británico, en un partido a cinco sets frente al belga Ruben Bemelmans, el ruso explotó: Cogió su cartera, tomó algunas monedas y se las arrojó a la árbitra a sus pies.
El moscovita, que había ganado al campeón del open de Estados Unidos Stanislas Wawrinka, fue sancionado con multas de hasta 12.700 euros. Además, podría caerle una sanción deportiva por su conducta aparte del torneo inglés.
Sus declaraciones
En la rueda de prensa posterior al encuentro, el protagonista del episodio fue cuestionado acerca de si dudaba de la integridad de la árbitra portuguesa Mariana Alves --que ya ha vivido varias polémicas con otros tenistas del ránking por sus decisiones arbitrales--. Medvedev respondió que "hice algo malo, me disculpo por mi actitud".
Al ser consultado sobre si creía que su rival había sido beneficiado, afirmó: "No, no, para nada, eso sería realmente estúpido". Aseguró que "lo que hice no tenía ningún significado especial".
Arrepentido
Medvedev reconoció que se había sentido frustrado por un fallo de la árbitra en el quinto set y que cuando estaba juntando sus pertenencias tras el partido y vio su cartera, se le nubló la mente: "No sé por qué lo hice, estaba frustrado por la derrota". Aún así indicó que "tal vez algunas decisiones han estado equivocadas, pero eso suele pasar en el tenis". Finalmente, remarcó sentirse "decepcionado".