Un cazador profesional sudafricano murió el pasado viernes durante una cacería en Zimbabue aplastado por un elefante. Lo que se suponía que debía ser su víctima, acabó por ser su asesino.
El cazador, Theunis Botha se encontraba acompañado de amigos y cazadores, se topó con una hembra elefante y sus crías. Botha, disparó a tres de las crías que embestían contra ellos cuando un cuarto animal le envolvió con la trompa y le levantó en el aire.
Uno de los integrantes de la expedición abrió fuego para salvar a su amigo. Tras los tiros, el animal se desplomó y cayó encima del cazador. Los otros cazadores no pudieron hacer nada por él tras morir aplastado.