El Tribunal Supremo ha ratificado una sentencia dictada por la Audiencia de Zaragoza que condena a un hombre a nueve años de cárcel por contagiar el virus del Sida a su pareja. Actualmente, ocultar a la pareja que se es portador del virus VIH y no usar protección en las relaciones sexuales es un delito penado con cárcel e indemnizaciones.
De este modo, el Tribunal ha fallado en favor de la joven que denunció a su pareja por ocultarle durante meses que era portador del virus. El hombre ha sido condenado a nueve años de cárcel y deberá pagar 200.000 euros de indemnización. La víctima es una joven rusa que inició una relación con el condenado en 2014 tras haberse conocido por Internet.
La pareja inició una relación tras conocerse y a los cuatro meses se fueron a vivir juntos. Un día, la joven acudió a donar sangre y fue entonces cuando le comunicaron que era portadora del VIH. Tras atar cabos, la joven denunció a su pareja por ocultarle la enfermedad y no usar métodos de protección. El acusado reconoció en el juicio que sabía que era portador y que le detectaron la enfermedad en 2009, pero argumentó que no se le había manifestado y que por tanto pensaba que no podía contagiar el virus.