La escritora británica Janice Hallett / CEDIDA

La escritora británica Janice Hallett / CEDIDA

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Janice Hallett: "Aprendes mucho de ti misma mientras escribes sobre otros personajes"

La escritora inglesa, considerada la Agatha Christie del siglo XXI, presenta su primera novela, 'La Apelación', en la que se resuelve un asesinato a través de correos electrónicos y whatsapps

28 febrero, 2022 00:00

Janice Hallett es una periodista, guionista y escritora británica. Juntando todos esos elementos, la autora de La Apelación debuta con su primera novela, un thriller epistolar que se resuelve a través de correos electrónicos y mensajes de Whatsapp. 

En el tranquilo pueblo de Lockwood ocurre un asesinato y, aunque se ha enviado a prisión al presunto autor del crimen, el abogado Roderick Tanner tiene firmes sospechas de que ha sido otra persona. Como si de un Cluedo se tratase, tanto los integrantes del pueblo como los lectores tendrán que descubrir quién ha sido realmente. 

La Agatha Christie del siglo XXI

Una trama propia de Agatha Christie, con la que se ha comparado a Hallett, aunque el toque epistolar de los e-mails le dan un tono más moderno y actual. Unas técnicas que ha adoptado gracias a sus trabajos como guionista en diferentes series de televisión.

Todos estos ingredientes han hecho que La Apelación sea uno de los libros más vendidos del Sunday Times. Janice Hallett reflexiona sobre el trabajo de una escritora y el proceso de creación de su novela de debut en una conversación con Crónica Directo

--Pregunta: ¿Cómo ha recibido el éxito de su primera novela?

--Respuesta: La acogida que ha tenido el libro en el Reino Unido ha sido maravillosa porque, como se trata de mi primera novela, nunca pensé que la gente se interesaría en mí. La Apelación salió en mitad de la pandemia, por lo que las librerías no estaban abiertas y la gente no tenía cómo conseguir mi libro; por eso estoy encantada con estos buenos resultados. 

--¿Cómo se siente cuando la llaman la Agatha Christie del siglo XXI?

--Me siento muy halagada cuando me dicen eso. No sé qué pensaría ella si la comparasen conmigo, pero me emociona mucho. Realmente, no se puede ser mejor que Agatha Christie [ríe]. 

--¿Ella ha sido una de sus referentes a la hora de escribir?

--Lo ha sido entre muchos otros. Empecé leyendo a Enid Blyton sobre misterios para niños y luego me adentré más en la literatura victoriana, porque yo estudié inglés en la London’s Global University. La Habitación, de Emma Donoghue, ha sido una gran influencia para este libro en concreto, porque la obra está escrita desde la perspectiva de un niño de 5 años y quería que mi libro tuviese también una perspectiva diferente a todo lo que se había contado anteriormente. 

--¿Cómo surgió la idea de escribir un libro epistolar, pero en forma de e-mails?

--Fue por accidente. Yo estaba escribiendo para televisión y tuve una idea para una serie sobre una pareja que había estado haciendo voluntariado en el extranjero y volvía a Inglaterra y esas experiencias fuera influían en la comunidad y en su apelación por el dinero. Esta idea me rondaba por la mente y, cuando decidí escribir una novela en vez de seguir con las series, pensé en contar esta misma historia, pero a través de e-mails entre los personajes. Es por eso que no escuchamos la voz de los personajes principales en casi ninguna ocasión, porque quería que la historia se contase a través de los personajes secundarios

Portada del libro 'La apelación', de la escritora británica Janice Hallett

Portada del libro 'La apelación', de la escritora británica Janice Hallett

--¿Cómo fue el proceso de escribir la novela? 

--Disfruté mucho del proceso, pero a veces fue un poco solitario y me sentía aislada, así que si eres una persona que no disfruta estando contigo mismo, probablemente este no sea tu trabajo ideal. Pero la pandemia me ayudó a centrarme mucho en el proceso de escritura y me mantuvo alejada de cualquier otra distracción. Dicen que todo el mundo tiene un libro dentro y yo creo que es verdad, pero tienes que sentarte y escribirlo.

--¿Tenía experiencia previa escribiendo en este género epistolar? 

--No, nada. Pero como he trabajado de guionista he transferido esas habilidades al libro: se trata de personas escribiendo más que hablando, aunque al final se están comunicando igual. 

--¿Planeó todo el argumento con antelación?

--No. Sé que otros escritores tienen una pizarra en la que escriben todo el argumento y la historia paso a paso, pero yo simplemente me puse a escribir y dejé que los personajes evolucionaran y fluyesen hacia el asesinato. Y ese es el motivo por el que el asesinato ocurre tan tarde en la historia, porque ni yo misma sabía quién iba a ser asesinado o quién lo iba a hacer hasta que llegué allí. 

--¿No le resultó caótico?

--Realmente, utilicé un método que se llama ingeniería a la inversa: en vez de crear el argumento, simplemente apareció cuando terminé el libro. Fue entonces cuando me di cuenta sobre qué iba el libro y sí que volví atrás para ordenarlo todo y terminar de cuadrar las piezas del puzle.

--¿Cómo fue el proceso de confección de los e-mails y los mensajes entre los personajes?

--No fue muy difícil porque realmente disfruté mucho describiendo a los personajes e ideando su lenguaje, sobre todo el cómo se saludan y se despiden entre ellos. Solo con eso podemos saber qué piensan del resto de personajes: a unos les saludan muy cálidamente mientras que a otros lo hacen más secos. Eso es lo que me llevó más trabajo. No fue duro, pero sí largo, porque tardé un año en escribirlo, pero disfruté cada momento. 

--¿Cómo creó el lenguaje de cada personaje?

--Hay muchos personajes en el libro, pero intenté darles una voz muy diferente a cada uno para que, mientras lo estás leyendo, no te haga falta leerte la introducción con la fecha, el asunto, el destinatario… sino que solo con el tono ya se supiera quién estaba escribiendo qué. Por eso, a la que lees unos cuantos capítulos, ya te dejas llevar por el ritmo del libro. 

La escritora británica Janice Hallett / CEDIDA

La escritora británica Janice Hallett / CEDIDA

--Su segundo libro, 'The Twyford Code', tiene una estructura similar a la de su primera novela.

--Sí, son transcripciones de audio. Es ligeramente diferente a mi primer libro, pero no es lo convencional. De hecho, mi tercera novela, que la estoy escribiendo ahora, está narrada básicamente a través de mensajes de Whatsapp. También hay algunos e-mails, pero la comunicación es más corta y rápida.

--¿Qué nos puede adelantar de este tercer trabajo?

--El tercer libro que estoy escribiendo se parece más a La Apelación que a mi segunda novela porque son básicamente intercambio de mensajes de Whatsapp entre dos periodistas que van detrás del mismo entrevistado involucrado en un crimen histórico

--¿Qué tiene este género epistolar que le llama tanto la atención?

--No lo sé. Quizás por mi pasado de guionista, porque estoy tan acostumbrada a construir personajes a través de los diálogos que simplemente lo estoy transfiriendo a las páginas en la novela. Creo que algún día seré capaz de escribir en tercera persona [ríe], pero aún hay mucho que explorar en este tipo de narrativa. Además, me encanta escribir de esta manera. 

--¿Hay similitudes entre escribir guiones y una novela?

--Sí, sobre todo en cuanto al énfasis que se le ponen a los diálogos, aunque hay algunas diferencias. Cuando escribes guiones siempre lo haces con otras personas: actores, productores… Además, si te quedas estancado, siempre tienes apoyo en estas otras personas. Pero con una novela estás tú sola: tú y la página durante mucho tiempo. Además, un guion se puede escribir en dos o tres semanas, pero para una novela se tardan entre nueve y doce meses. 

--¿Cómo fue que cambió de escribir guiones a novelas?

--Realmente yo empecé en el mundo del periodismo, en el que estuve 15 años, desde que terminé la universidad hasta la mitad de mis 30, y lo disfruté mucho, pero al final acabé bastante quemada. Después, corté con todo y fui por mi propio camino; ahí es cuando empecé a escribir guiones para series y películas. Pero también terminé desilusionada, porque escribía series para otras personas, pero yo quería tener mi propia voz. Así que terminé escribiendo un libro para plasmar las ideas que yo sola tenía. 

--¿Qué consejo le daría a alguien que quiere escribir una novela?

--Realmente no hay nada especial en mí para dar consejos: simplemente me senté y escribí las ideas que tenía en la cabeza. Así que, si yo lo he hecho, cualquiera puede hacerlo. Además, es un gran ejercicio, porque aprendes mucho de ti mismo mientras escribes sobre otros personajes.