Alejandra Rubio vuelve a ser actualidad. Tras su ruptura hace tres meses con el malagueño Carlos Agüera, la colaboradora de televisión tiene un nuevo amor. Esta vez, catalán. Y su madre ya lo conoce.

Hace tiempo que se habla de que la nieta de María Teresa Campos estaba con alguien, pero las últimas imágenes publicadas por varios medios en las que se la ve con un chico en actitud cariñosa no sajan lugar a dudas.

Alejandra Rubio EP

Pasado en el FC Barcelona

El joven de las imágenes es Carles Aleñá, tiene 25 años y es jugador del Getafe FC. Natural de Mataró, siempre tuvo claro que quería ser futbolista y, tras formarse en las divisiones juveniles del Barça, se ha ganado una plaza de centrocampista en el club levantino con el que juega en primera división.

La misma madre de Rubio, Terelu Campus, quien lo conoció de forma “circunstancial” defiende su profesionalidad a la hora de hablar de él. "Este chico es un deportista comprometido con su profesión”, afirma en Sálvame para pedir discreción y respeto por ambos.

Sálvame

“Entiendo que haya preocupación porque nosotros, que somos la prensa, podamos alterar su trabajo", razona, por lo que espera que sus compañeros de programa no le den mucha caña y respeten a su hija y al chico.

Pese a que se encontraron de forma "casual" y sólo hablaron de fútbol, Terelu vela por que su hija pueda vivir su vida como quiera. Aunque Kiko Matamoros ya ha dado más datos de su relación: habría comenzado hace tiempo, aunque se habría mantenido en secreto por prudencia.

Habla Alejandra

La situación no es del agrado de Alejandra Rubio quien, al ver a la prensa a las puertas de su domicilio en Madrid, se ha mostrado visiblemente molesta por la situación. "No me grabes ahora, porfa, que salgo de casa llena de pelos de los gatos y todo. No me hagas esto, por favor. Lo siento en el alma, ya sabéis que os contesto siempre. Me da mucha cosa pero... Perdón", le espeta a las cámaras.

La influencer ha evitado decir nada más, ni siquiera confirma o desmiente una relación que su propia madre ha confirmado. ¿Guardará silencio por mucho tiempo o se verá presionada a hablar por su trabajo?