Muchos la consideran acabada, pero lo cierto es que Madonna ha agotada sus entradas para el concierto de Barcelona del 1 de noviembre en pocos minutos. Lo ha hecho no sin polémica, pero lo ha compensado con una nueva fecha, para el día siguiente. Y entonces el escándalo ha sido doble.
La reina del pop anunciaba este martes que regresa a la carretera con el The Celebration Tour, una gira en la que hace un repaso a sus grandes éxitos en los 40 años que lleva en el mundo de la música. Este jueves las entradas salían en preventa y este 20 de enero, para el público en general.
Primeras críticas
El escándalo llegó este 19 de enero cuando las entradas se agotaron en poco más de 15 minutos. Poco a poco, la organizadora del evento, Live Nation, y la encargada de la venta de las entradas, Ticketmaster, decidieron revalorizar las entradas y las llegaron a poner al doble de lo previsto, sin ser pases VIP
Si la entrada más cara era de 300 euros, llegaron a ponerla a 600, más los gastos de gestión que se elevan hasta 80 euros. Hoy ha pasado exactamente lo mismo. A esto se le suma que los pases VIP van de los 340 a los 1.020 euros si sumas los gastos de gestión.
Nuevo problema
El hecho es que ha sido un éxito. Los fans han comprado las entradas y hay disponibilidad limitada para el día 1 y han añadido una fecha extra, para el 2 de noviembre en el mismo Palau Sant Jordi. El problema es que, en un primer momento, a los que esperaban en la cola para sacar tickets para el día de Todos los Santos les informaron que la fecha adicional sería en Madrid.
El caos ha sido generalizado. Muchas personas decidieron esperar a que se pusieran a la venta los boletos para la capital. La sorpresa llegó minutos después cuando en la web comprobaron que ya estaban a la venta las entradas, pero en la ciudad condal. Pese a las quejas por los precios y estos errores, ni Live Nation ni Ticketmaster responden.