La vida de Jorge Javier Vázquez ya no es la que era. Lo ha confesado él mismo en varias ocasiones y lo relata en su libro autobiográfico-confesional, pero ahora ha mostrado imágenes que han sorprendido a propios y extraños.
Nada que ver con Marilyn Monroe y sus gotas de Chanel, a la que se mete en la cama requiere de varios aparatos, pero el más vistoso es la máquina para la apnea.
Conectado por las noches
El catalán comparte en su blog una imagen donde se le ve con una especie de máscara pegada a su nariz y boca, con un par de tiras que ayudan a sujetarla para que no se caiga. Todo ello va conectado a un tuvo conectada a un humidificador con capacidad para dos litros de agua.
"¿Y os parece de recibo que a las primeras de cambio me vea con esta máscara que va conectada a un tubo larguísimo para que me pueda mover a mis anchas durante la noche sin temor a desconectarme?", pregunta a sus seguidores.
Humor ante todo
La máquina es muy vistosa y, como señala el de Badalona, contradice sus mayores deseos de cómo pasar una buena noche. "Con la de veces que he dicho que hay que proteger la relación de elementos prosaicos --pijamas, despertares con la cara hinchada-- y ahora tengo que pasarme todas las noches del resto de mi vida con estas pintas tan poco favorecedoras", se lamenta.
El presentador de Sálvame bromea con poder atraer sólo a hombres que le guste Star Wars, aun así tiene claro que "no iba yo muy desencaminado cuando pensaba en lo de las habitaciones separadas si apareciera otra persona" en su vida. "Cada vez me parece mejor idea coincidir en la cama solo para celebraciones y no por obligación", sentencia.