Después de meses de especulaciones y crisis, Ana María Aldón y José Ortega Cano anunciaron que se iban a separar. Ahora, tras una serie de negociaciones por sus bienes y la custodia de su hijo Jose María, el ya exmatrimonio por fin ha firmado el divorcio.
"El acuerdo está firmado. Es un mero trámite que necesitaba para el divorcio", confirmó la colaboradora de Fiesta ayer en su programa. Además, también le ha asegurado a Emma García que tanto ella como el diestro han estado en el notario y que todos los puntos del acuerdo en los que había diferencias, se han resuelto de la mejor forma posible.
Tranquila y en paz
A pesar de que no ha querido dar más detalles de cómo han quedado los términos de este acuerdo, sí que es cierto que la diseñadora se encuentra mucho más tranquila y en paz después del difícil verano que ha pasado en el que incluso se tuvo que pedir la baja laboral debido a su delicado estado de salud.
De esta forma, Aldón está cada vez más cerca de comenzar su nueva vida en solitario, pero siempre con la presencia de sus hijos. Tras hacerse oficial su divorcio, la diseñadora ya se podrá mudar a la casa que se ha comprado en Guadalajara y seguir con sus compromisos laborales.
Nueva vida
"Dentro de lo más cerca del cole es una zona que me gusta, un pueblo que me gusta, y está cerca. La tranquilidad también, es un pueblo muy tranquilo. Tiene todo tipo de comercios, me gusta muchísimo. Y estoy muy cerca de la guardia civil y eso me produce una seguridad tremenda", ha explicado la colaboradora sobre su nuevo hogar.
Además, ha querido aclarar que nadie la ha ayudado a pagar su nueva vivienda, ni tan siquiera el torero: "En esta nueva casa no ha cobrado nadie. Mi casa es mi casa". Una propiedad que se le suma a la que ya tiene en Sanlúcar de Barrameda: "No se la debo a nadie y nadie me va a poner ni una puerta ni una ventana", ha dicho de lo más empoderada.