Kiko Rivera recibió el alta hospitalaria este lunes al mediodía después de cuatro días en el hospital por un ictus. El hijo de Isabel Pantoja ha pasado la primera noche en casa acompañado de su mujer Irene Rosales y ha tomado una drástica decisión respecto a su futuro.
Y es que, según el programa Fiesta, el músico arrastra secuelas, como una parálisis facial parcial en la parte izquierda de la cara y problemas de movilidad, por los que necesitaría ayuda para realizar cosas tan cotidianas como andar, comer o asearse. Es por eso que el Dj ha decido cambiar de hábitos en su vida para conseguir recuperarse mucho más rápido.
Cambio de hábitos
"Nueva vida, ahora toca cuidarse. Toca pensar en mi", compartía en sus redes sociales este lunes poco después de llegar al domicilio. La primera de sus decisiones centradas en él mismo tiene que ver con desterrar de su vida tanto el azúcar como el tabaco, dos hábitos nocivos que en estos delicados momentos podrían ser perjudiciales para su estado de salud y para su recuperación.
"Esta vez sí, por cojones. Un fumador menos en el mundo, aunque con ayuda de este aparatito con su líquido sin nicotina y con mi parcha que me llega hoy", ha explicado en sus stories de Instagram. Asimismo, ha desvelado que esta mañana ha desayunado un bizcocho sin azúcar.