Tamara Falcó e Íñigo Onieva siguen siendo dos de los personajes más buscados del momento tres semanas después de su polémica ruptura. Sin embargo, en los últimos días se rumoreaba que la pareja podría haber vivido un acercamiento y los dos desaparecían del foco mediático simultáneamente. Ahora, tanto la marquesa de Griñón como el empresario han revelado en sus respectivas redes sociales el destino que han escogido para huír de la presión mediática.

La hija de Isabel Preysler ha peregrinado por primera vez al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes, en Francia, con los voluntarios de la Hospitalidad de la Virgen de Lourdes de Madrid. Una experiencia que Tamara ha asegurado que no "olvidará jamás". "Vuelvo a Madrid feliz", ha confesado en su última publicación en Instagram, donde ha compartido diferentes imágenes de lo vivido en los últimos días.

Viajes

La colaboradora de El Hormiguero aparece vestida con el uniforme característico de las voluntarias en este tipo de peregrinajes: bata azul marino con delantal y cofia en blanco. La socialité ha descrito el viaje como una "oportunidad única" en la que, una vez más, se ha apoyado en la fe para superar su dolorosa ruptura con el empresario.

Mientras Tamara viajaba a Lourdes, su exnovio también ponía tierra de por medio y abandonaba Madrid el pasado 12 de octubre para viajar a Estambul acompañado de su madre, Carolina Molas. Una escapada muy especial de la que el joven ha compartido varias pinceladas y ha demostrado que su progenitora se ha convertido en uno de sus pilares en las últimas semanas.