Un nuevo caso de acoso y abuso sexual en el mundo de la música. Tres mujeres han denunciado a Win Butler, fundador y miembro de Arcade Fire, por supuestas relaciones sexuales inadecuadas.
Era 2016 cuando estas tres víctimas empezaron a tener relaciones con el músico. Ellas apenas tenían 18, él 36. Hasta el 2020, siguieron manteniendo contacto. Pero no son las únicas. Una cuarta persona de “género fluido” alega que sufrió abusos dos veces en 2015 cuando tenía 21 años y el cantante 34.
Denuncias
Las cuatro denunciantes detallan que Butler siguió un método muy parecido con ambas. Les contactó por redes sociales antes de conocerles en persona. Una vez empezaron a hablar les reclamó sexo y fotos de sus cuerpos desnudos. El cantante también hacía lo propio. Una de ellas afirma que él le envío fotos de sus genitales en contra de su voluntad.
Por su parte, la persona que se identifica como alguien con “género fluido” ofrece un relato más espeluznante. Afirma que un día el artista irrumpió en su apartamento y, sujetándole contra la pared y manoseando su cuerpo, le tocó sin su consentimiento. Un hecho que ya en ese momento la víctima sintió que “no estaba bien”.
Defensa
El artista, casado desde 2003 con otra de las fundadoras del grupo Régine Chassagne, niega cualquier acusación. En declaraciones a Pitchfork, publicación que ha revelado la información, Butler admite que tuvo esas relaciones pero que fueron “consensuadas”.
“Nunca he tocado a una mujer en contra de su voluntad y cualquier insinuación de que lo he hecho es simplemente falso”, asevera el integrante de una de las bandas más icónicas del indie.
La esposa de Butler
Sobre supuestas acusaciones de infidelidad, Butler sostiene que su matrimonio es “menos convencional que otros”, de manera que su esposa es conocedora de sus relaciones fuera de la pareja.
La misma Chassagne ha salido en favor de su esposo y defiende su inocencia. En decaraciones a la misma publicación, afirma "estar segura" de que no existieron tales abusos por parte del cantante.