Sonia Madoc, de Sonia y Selena, descarta el regreso del dúo: "Es mejor así"

"Cuando llega el calor..."... Desde hace 21 años, el tema Yo quiero bailar forma parte de las listas de reproducción de las fiestas más verbeneras de este país. Era 2001 cuando Sonia y Selena daban el salto al estrellato con un tema con el que lograrían vender 1,5 millones de  copias. El explosivo dúo fue incluso uno de los preseleccionados para ir a Eurovisión, aunque se disolvió un año más tarde tras el lanzamiento de otro de sus grandes éxitos, Deja que mueva.

En esta entrevista con Crónica Directo, Sonia Bessada, más conocida como Sonia Madoc (1974), hace balance de estas dos décadas de carrera, cuenta cómo fueron sus inicios, habla de su separación de Selena, confiesa que dejó la Psicología para dedicarse a la música y revela si todavía tiene ganas de bailar toda la noche. Hoy acumula casi 120.000 seguidores en Instagram, colabora en televisión, afronta el verano con una gira por delante y avanza nuevos proyectos.

--Pregunta: ¿De dónde nace su nombre artístico?

--Respuesta: Fue un invento mío. Lo hice a priori cuando monté una boutique de moda hace unos años después de Yo quiero bailar. Estuve creando mi propio estilo y Madoc pues nació de intentar crear ilusión a través de la moda, para que la mujer estuviera y se sintiera bella. A raíz de la boutique me lo quedé como nombre artístico.

--Se dio a conocer junto a Selena. ¿Qué fue del dúo? 

--Yo antes hice música dance y maxi singles. Con Selena fue un proyecto muy bonito, pero se disolvió por visiones diferentes, diferentes puntos de vista profesionales.

--¿Podría haber un regreso en el futuro, por ejemplo con motivo del 25 aniversario de la canción?

--No. Cuando las cosas se acaban mejor que se queden así. Cada una por su lado y es mejor.

--¿Qué cree que tiene ‘Yo quiero bailar’ para que siga sonando cada verano?

--Es una canción pegadiza y alegre con melodías fáciles de recordar que huele a hit. Cuando se crea un hit lo cantan niños, pasa de generación en generación y se convierte en un himno. La verdad es que Yo quiero bailar transmite muy buen rollo.

--¿Cómo gestionó la fama del momento?

--Fue todo muy rápido. Pasas del todo a nada en una semana. En mi caso, me acostumbre rápidamente, me di cuenta de que forma parte de mi trabajo, y que cuando te piden autógrafos o fotos es porque lo estás haciendo bien. Sinceramente, el reconocimiento del público es algo muy bonito, lo recuerdo como un momento muy dulce.

--¿Cómo cambió su vida?

--Pues pasas de tener una fuente de ingresos moderada a una elevada. De tener una vida tranquila a estar viajando todo el día, aparecer en radios, teles, revistas... Vives por y para el trabajo. No tienes ni un solo momento para ti, para estar tranquilo en casa. Recuerdo que nos pilló con 25 años y a esa edad te comes el mundo.  

--¿Había pensado en dedicarse a la música?

--Sí, desde pequeñita. Dejé la carrera de Psicología por la música, desde pequeñita me llamaba mucho la atención no solo la música, sino que también los artistas como Madonna, Olé Olé..., me encantaban. Yo creo que ya tenía un gen por ahí manifestándose.

--¿Todavía hoy la paran por la calle?

--Alguna vez, sí, todavía me reconocen. Quien es fan lo será eternamente y sí que es verdad que he tenido muy buena acogida, sobre todo, en el colectivo gay.

--¿A qué cree que se debe?

--Por la imagen, el vestuario, el look, la fuerza que transmito, así todo como muy brava. Son elementos muy propios, aunque lo cierto es que el colectivo ha hecho de Yo quiero bailar un himno y eso es superbonito. He estado actuando en el Pride de Tailandia como Reina de la comunidad latina gay y para el Pride de Barcelona, en 2012, creamos el himno de la besoterapia con Yo quiero besar.

--¿Si tuviera ahora que hacer de nuevo el tema, cómo lo haría?

--Fusionaría algo con el estilo con el que funciono. No lo cambiaría mucho, ya sabes, si algo funciona no lo toques. Es una aberración. Quizá le daría algún aire nuevo, para que el público no lo asociara a una canción del pasado, pero no la cambiaría mucho.

--¿Por qué Jorge Javier Vázquez fue el escogido para reeditarlo?

--Tanto el productor como yo consideramos que en el 20 aniversario debíamos hacer algo diferente. Volver a cantar la canción con Jorge Javier podía ser divertido, original, así que se lo propuse. A él le encantaba la canción y me dijo que sí al momento.

--¿Se puede vivir toda la vida de una canción?

--No, no. Hay que hacer muchas. Sí que al principio tienes ingresos, pero no para vivir eternamente. No es lo mismo ser el productor del tema que el intérprete y en este caso yo soy la intérprete, su autor es Chasqui Ten.

--21 años después y todavía la siguen llamando por el mismo ‘hit’. ¿No se cansa?

--No, no se me hace pesada. Sigo haciendo bolos con ella y estoy encantada. Este verano sigo con la gira. Yo quiero bailar toda la noche y toda la vida (ríe). Ojala que dure mucho más.

--¿Cómo afronta el verano?

--Con gira, pero también con proyectos nuevos. Primero tengo que acabar lo que no se pudo hacer durante el Covid-19 y ya luego me enfoco en todo lo nuevo.

--¿Cómo ve a Chanel?

 --Me encanta. Es un pedazo de artista tanto estético como cantante. Es pura adrenalina, una artista muy completa, para mí es un diez en todo.

--Incluso participó en el anuncio de apoyo a Chanel en Netflix…

--Sí, fue una iniciativa muy bonita, maravillosa diría. Estar con Raúl, Melody… Fue un día de grabación muy emotivo con gente sana, con alegría. Cada uno nos preparamos nuestras partes y salió un proyecto que fue una maravilla.