El escritor español Arturo Pérez-Reverte ha rendido homenaje a un icónico grafitero patrio que ha fallecido en accidente de moto. El novelista ha utilizado las redes sociales para mandar sus públicas condolencias a los familiares de David, alias Lose, que falleció al estrellarse contra un autobús en Madrid.
En dos mensajes en su cuenta oficial de Twitter, Pérez-Reverte ha informado de que "ayer, volviendo en moto de hacer un favor a un amigo, David, cuyo alias Lose es una leyenda en el mundo internacional del grafiti, murió al estrellarse contra un autobús". A renglón seguido, el literato ha reconocido que sus amigos lo lloramos hoy. Abro hilo de imágenes".
Piezas en Egipto y Rusia
En la recolección de Pérez-Reverte, el genio de las letras hace un repaso a la faceta más pública y la más íntima de Lose. Entre otras anécdotas, el escritor avanza que "pintó trenes hasta en el Cairo y Moscú, jugándosela. Imaginen si lo llegan a trincar alli. Era muy bajito, pero tenía unas agallas que no le cabían en la ropa".
David no solo utilizaba los espráys, sino que trabajaba con sus manos. Era un "electricista excelente" cuyas dotes demostró al instalar las luces de la biblioteca del narrador. "Jamás quiso aceptar dinero a cambio", desliza el entonces cliente.
La sombra de Alatriste
El artista urbano acuñó la técnica del "palancazo", explica Pérez-Reverte, o activar la alarma de los trenes o convoyes de Metro para detenerlos y poder pintar sobre ellos. "Se infiltraba como un comando. Dominaba la táctica de un modo admirable. Yo lo admiraba. Todos en el mundo del grafiti lo conocían y lo respetaban", agrega.
Estas acciones urbanas sirvieron de inspiración al novelista para algunas de sus novelas. David le explicó algunas de ellas al autor en "la taberna del capitán Alatriste, donde no podía faltar el jamón con tomate y los fideos al horno que tanto le gustaban a Lose".
"Era mi amigo hijo de puta"
Explica el prosista que un día, tras hacerse una foto, "pasaron unos policías en un coche, y al ver la compañía me preguntaron mosqueados si todo iba bien. Cuando se alejaron, Lose dijo "Es la primera vez que veo tan cerca a un madero y no salgo corriendo".
"Su firma era su trofeo. Con un aerosol en la mano era un hijo de puta, pero era mi amigo hijo de puta. Lose", apostilla Pérez-Reverte incluyendo en sus tuits una foto de un grafiti del finado.